Madonna comenzó a suspender conciertos a fines de 2019, cuando el coronavirus todavía no había impactado de lleno en la industria de la música. El motivo, en un principio, no fue la pandemia sino su estado de salud, que la tenía a maltraer.
Ahora, la diva, de 62 años, mostró en Instagram la cicatriz que le dejó una operación de cadera y las marcas que tiene en su cuerpo como consecuencia de los tratamientos para calamar el dolor.
Pero no sólo eso; la foto posteada por Madonna fue acompañada con el hashtag #BeautifulScars, que remite a su tema de 2015 en el que invita a todos a mostrarse con las imperfecciones que cada uno lleva consigo. “Me presento a ti con todos mis defectos, con todas mis hermosas cicatrices”, canta la diva en el inicio del tema.
En octubre del año pasado, la cantante pospuso un show en Nueva York por problemas en sus rodillas. El noviembre, canceló tres fechas en el Boch Center Wang Theatre de Boston por orden médica. En enero de 2020 dio de baja un espectáculo en Lisboa dos horas antes de subirse al escenario. Al mes siguiente se la vio caminar con un bastón.
La intérprete de Like a Virgin nunca negó su malestar físico y compartió a través de redes sus múltiples terapias. En plena gira del Madame X Tour, subió un video en donde se la puede ver dentro de una bañera con hielos. La cantante escribió: "Mi usual baño frío para las múltiples heridas".
Después de varios meses de rehabilitación, la estrella pop, quien confesó que ha terminado shows llorando del dolor, se sometió a una cirugía de cadera para aliviar algunos de sus problemas. A través de sus historias de Instagram, la celebridad mostró con orgullo la gran marca que le dejó la intervención. Acompañó la foto con el hashtag hermosa cicatriz.
En la imagen también se observan numerosos círculos en sus piernas como resultado de una terapia alternativa en la que se utilizan copas con ventosas para aliviar el dolor en el cuerpo.
Por primera vez en más de 30 años de trayectoria su salud no la acompaña. Madame X Tour fue la gira con más conciertos de toda su carrera. Más de 100 recitales en seis meses. Según su entorno, la combinación de todos estos factores hizo que su cuerpo dijera basta.
"Por favor, perdonen este giro inesperado de los acontecimientos. Hacer mi actuación cada noche me divierte mucho y cancelar es una especie de castigo para mí, pero el dolor que padezco ahora mismo me está superando y debo descansar siguiendo las recomendaciones del médico para poder volver más fuerte y continuar la gira", escribió en su perfil de Instagram para sus más de 15 millones de seguidores en febrero luego de que se anunciara la cancelación de los tres conciertos en Boston.
La seguidilla de presentaciones concluyó el 9 de marzo, antes de los dos últimos conciertos previstos en la capital francesa por la pandemia.
Además de sus complicaciones físicas, la cantante confirmó que se contagió coronavirus. “Estuve enferma al final de mi gira en París hace siete semanas, como muchos otros artistas de mi espectáculo”, puso en Instagram y agregó: “Pero en ese momento todos creíamos que teníamos una gripe. Gracias a Dios ahora todos estamos en forma y en buen estado de salud”.
Madonna donó un millón de dólares para ayudar con las investigaciones. “Me uno a los esfuerzos de la Fundación Bill y Melinda Gates en la búsqueda de un medicamento que prevenga o trate la COVID-19. Lo necesitamos para proteger a nuestro personal médico, los más vulnerables, y todos nuestros amigos y familiares”.