Bien podría decirse que todo empezó con una serie de palabras sin sentido. Donald irrumpió en el mundo del espectáculo, a fines de los ‘60, cantando Sucundum y Sequeten Sequeten. Siguió con Racatacata, Poponsh Poponsh, Scaba badi bidu y Chequendengue. Una onomatopeya tras otra, los grandes éxitos que supo construir. Ahora, medio siglo después, un meme con su foto y la frase “compañeros chequen dengue chequen dengue” vuelve a colocarlo en la cresta de la ola.
Nacido el 9 de julio de 1946, casado hace 47 años con Verónica Zemborain, Donald tiene cuatro hijos y nueve nietos. Cantante, compositor y conductor de televisión, protagonizó tres películas en aquellos tiempos de gloria: En una playa junto al mar, con Evangelina Salazar, Jorge Barreiro y Eddie Pequenino; Siempre fuimos compañeros, junto a Rossana Falasca, y Un viaje de locos, con Taryn Power (la hija de Tyrone Power), Marcelo Marcote, Antonio Gasalla, Carlos Perciavalle y Juan Alberto Mateyko. En los ’80 se radicó en los Estados Unidos y al volver todo había cambiado. Sin embargo, el recuerdo de sus canciones más pegadizas en el inconsciente colectivo, le permiten integrar la imaginaria categoría de “artistas sin fecha de vencimiento”. De risa fácil y siempre guitarra en mano, lo primero que aclara es que el suyo no es un seudónimo.